El sol apenas comenzaba a descender sobre el horizonte de Juchitán cuando las familias empezaron a llegar a la Unión Ganadera Regional del Istmo. El evento, organizado por el Sistema DIF Municipal, prometía una tarde llena de emoción y alegría para las niñas y niños de la comunidad, y desde el comienzo, quedó claro que la promesa se cumpliría con creces.
En punto de las 5 de la tarde, la música comenzó a sonar y el ambiente se llenó de risas y murmullos emocionados. Los niños, con sus padres y hermanos, se acercaban a las filas para recibir dulceros, juguetes y boletos para las rifas de bicicletas, patines y muchos otros premios que hacían brillar sus ojos con entusiasmo.
Sin embargo, el plato fuerte de la tarde sería la función de lucha libre. Un ring se erigía en el centro del terreno, y los más pequeños ya comenzaban a agruparse para sentarse junto con sus familias, esperando el espectáculo. Los luchadores, con sus coloridas máscaras y atuendos, entraron con energía, animando a la multitud y provocando gritos de emoción.
La lucha comenzó, y los niños no paraban de aplaudir y gritar con cada movimiento acrobático y cada giro espectacular. Los luchadores, conscientes de que el público estaba compuesto mayormente por familias y niños, hicieron de la función una experiencia divertida y segura, interactuando con el público y asegurándose de que todos se lo pasaran bien. Incluso hubo momentos cómicos que arrancaron carcajadas a grandes y pequeños por igual.
El Sistema DIF Municipal, bajo el liderazgo de, Yoshira Sánchez López, y su equipo comprometido, había preparado todo con esmero. El evento no solo ofreció entretenimiento, sino que también brindó un espacio seguro y lleno de alegría para que las familias pasaran tiempo de calidad juntas. Los organizadores se aseguraron de que cada detalle estuviera cuidado, desde la distribución de los dulceros hasta la organización de las rifas, lo que permitió a las familias disfrutar de una tarde libre de preocupaciones y llena de diversión.
